jueves, enero 11, 2007

Pedazo de sorpresa!

Hoy me estaba dirigiendo hacia el comedor universitario, andando junto a Irene y Arturo.

Nos juntabamos por segunda vez desde que comenzó el año, y la vez anterior había sido hacía escasa una hora... Caminabamos felices hablando de tonterias como casi siempre, y justo al llegar a la pequeña explanada enfrente del comedor universitario (un sitio donde están arremolinadas un montón de bicicletas, puesto que nadie aparca bien), me encontré a mi compañero de Shakuhachi (Flauta tradicional japonesa que toco en el club al que pertenezco).

Según me ve Nakayima que así es como se llama, se gira y se dirige hacia a mí. Yo le estaba saludando desde lejos, celebrando que era la primera vez que nos encontrabamos en el año, y sonriendo felízmente a la agradable persona que se hallaba a unos metros de mí.

Él me sonrió como casi siempre, abrió una carpeta donde tiene metidos sus apuntes de Ruso y Español (cursos a los que asiste asiduamente, y que por su impresionante buen acento en español, diría que se le da muy bien), y me entrega con todo respeto un papel fotográfico de tamaño folio en el que había impresa la foto de dos personas.
Al mirar la foto, durante un segundo me quedé como si... vale, muy bonita la foto, ¿y quién son?, pero un segundo mas tarde me di cuenta de que esa foto era mucho mas que un mero papel impreso.

La historia no tendría mucho mas de sí: alguien que le entrega la foto a alguien... y ésta se asombra. Uaaaauuuu, ¿será que me han pillado desnudo infraganti? ¿han pillado a alguien infraganti? ¿es la foto de algún familiar suyo?....

Realmente, Nakayima no deja de sorprenderme. Él es un hombre de unos cincuenta y pico años, que hasta hace sólo un par, era el presidente nada mas y nada menos que de una importante empresa de papel.

Me asombra no solo que decidiera jubilarse por adelantado para disfrutar de la vida (cosa que me choca enormemente con la mentalidad japonesa), me asombra que hable inglés perfectamente aunque tenga su pequeño acento japonés por no haberlo usado en mucho tiempo (porque estudió en Inglaterra), me asombra que con cincuenta y pico largos años, decida meterse en la universidad para aprender español (o mejor dicho recordarlo, porque ya sabía hablarlo y se le ha olvidado), y para aprender ruso.

Me asombra que intente tocar el shakuhachi (empezó tan solo unos meses antes), me asombra que quiera conocer a gente (dada la naturaleza tan tímida que tienen estos japoneses).

La verdad que me gusta escuchar lo que dice, porque siempre te habla en un tono distendido, entre risas, y siempre desde la experiencia de haber triunfado en la vida, y no por ello sentirse prepotente para nada.

Me asombra que apesar del pedazo cochazo que tiene, decida venir en tren todos los días a la universidad para sentirse como uno mas (y eso que si usase el coche, tardaría una hora como mínimo menos en llegar a su casa). Me asombra, que apenas habiéndonos conocido, nos haya invitado a tomar una cerveza en el bar de un amigo suyo, y lo haya hecho porque realmente se sentía agusto con nosotros.

Incluso me asombra que nos haya invitado a pasar un día en su casa.

Pero lo que mas me asombra, es que me haya enseñado esa foto. Esa foto de dos personas. ¿Cómo llegaría a sus manos? ¿Cómo puedo explicar que imprimió esa foto sólo para mi? ¿Cómo puedo explicar que ésto es lo que me entregó?


Sí, ése soy yo. La foto fue tomada hace mas de cuatro años (todo dicho sea de paso, esa es una de mis camisetas favoritas, que por cierto, no se donde está). Y el de al lado....

Hace años, cuando colaboraba con la universidad asistiendo a los extranjeros, me pidieron un favor personal, que diera una vuelta a unos chavales que venían a estudiar español a Salamanca. Yo accedí sin problemas, me gustaba hacerlo. Pero me advirtieron de que no me entenderían, porque sólo y únicamente hablaban japonés.

Era una excursión de la Universidad de Tenri. Sí, efectivamente, el sitio donde me encuentro ahora mismo. Allí en la excursión, un "monje" que me sirvió de traductor, y me comentó el tema de una beca que estaban preparando para un chico de informática; pero que por temas personales no podía venir, y dado que yo estudiaba informática... ¿porqué no me venía yo a japón por él?
Y yo le respondí (y me acuerdo de ello como si fuera hoy):

-Hombre... pues nunca me lo he planteado. La verdad que yo me quería ir a vivir un año a Honk-Kong. Pero Japón.... me puede valer.

Éste, amigos, es el inicio de mi viaje; el incio de una esperanza, de un sueño, que ha tardado cuatro años en cumplirse. ¿porqué he tardado tanto? yo diría que el azar, la suerte; cosas de la vida dirían otros.

Al día siguiente de la excursión, en la cafetería de la universidad, varios japoneses me pidieron que me hiciera una foto con ellos. Yo acepté encantado. No se quién es, lamento decir, pero es que las caras de los japoneses, ahora he aprendido a distinguirlas, y él... con unos cuantos años mas... debe ser irreconocible gracias a las extrañas modas que tienen por Japón.

No se como Nakayima ha conseguido esta foto, pero me ha gustado. Otra gran sorpresa en un hombre lleno de sorpresas. Ver la foto ha sido como un flashback a aquella época, a aquella ciudad, a esos amigos, a aquellos problemas... hoy, recordarlo es un bonito sueño.

Sea como fuere, años mas tarde y con unos cuantos países y ciudades de por medio... aquí estoy, cumpliendo ese sueño que forjé en ese momento.

Gracias de todo corazón, Nakayima. :D

2 Comments:

Blogger UTRE Dixo...

como mola y que suerte
como pa haberte portado mal con los japos esos
saludos

12:53 a. m.  
Blogger Diego Pino Dixo...

Me encantan estas historias, estos reencuentros con el pasado, estas vueltas de tuerca sobre el destino ¿Casualidad o causalidad? Todo esta enlazado...

Yo también sueño con vivir 1 año en Japón, ya lo sabes. Por avatares del destino (o por la política de asignación de destinos de ICEX) acabé viviendo 1 año en Hong Kong. Que casualidad. Aún así sigo en ello.

En cuatro años has cumplido tu sueño. Eso es un abrir y cerar de ojos. Las grandes metas siempre llevan tiempo...

Cuidate apañero, ki wo tsukete!

11:41 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home