Y de Tallín me traje el frío... y buenos recuerdos

Bonita aventura la de este finde.

Me han venido a visitar desde Moscú (Sergito, Elenita y Nachín), y desde Roma (Rubenín), y finalmente desde París (Juanín).

no me pregunteis cual era la razón, pero terminamos en Tallín, capital de Estonia. Ahora entiendo cual era la razón.

Cogimos un maravilloso barquito, y tras 3 horas y media nos plantamos allí, en un hotel de 4 estrellas.

Según desembarcamos sentimos ese frío que son esos -24 grados, pero de los húmedos (esos que se te mete el frío hasta en los calzoncillos).

Por la noche, salimos de fiesta, y entramos a la ciudad antígua (conserva la entrada medieval, y parte de las murallas), por lo que la estampa era de lo mas idilica.
Fuimos a un primer bar, lleno de... MONUMENTOS!!!

Es impresionante, pero es que todo eran pivones por un lado y por otro. No creo que lo entendais, pero es que uno se queda cohibido ante semejante espectáculo. Fotos no se si hay, pero baba dejamos bastante.

El segundo sitio al que fuimos de fiesta... peor. Mucho peor. Se habían juntado por un momento todas las mazizas del país en el mismo sitio. Ahi ya teníamos hasta temblores y sudores. Que mal se pasa...

En fin, solo quería dejar este post para deciros que quizás muy probablemente, me acabe mudando a Tallín.

QUE GRAN PAÍS!!!!

Lo voy a volver a visitar pronto, muy pronto. Prontísimoooooooooo!!!! XDDDD